ÚLTIMA ACTUALIZACIÓN 29 junio, 2021 a las 16:49
En el artículo sobre la luz natural en fotografía ya explicamos los puntos importantes a tener en cuenta y que son vitales que conozcas para aprender a medir y exponer una fotografía correctamente.
Como nos queremos centrar en fotografía de viajes aplicada de forma práctica,no nos vamos a extender demasiado en conceptos teóricos complejos o en cosas que realmente no se van a aplicar sobre el terreno.
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Medir y exponer una fotografía: Elementos esenciales
Hay dos conceptos esenciales que necesitas dominar para medir y exponer una fotografía correctamente. Estos son:
- El triángulo de la luz: Te ayudará a controlar la cantidad de luz que llega al sensor de la cámara.
- El exposímetro: Es un chivato que te avisa de si la foto está sobreexpuesta o subexpuesta.
- Los modos de medición de la cámara: Serán tu herramienta selectiva para captar la luz de una determinada escena.
Estos elementos no funcionan independientemente, están interlacionados y enteder qué son es fundamental para que salgas ahí fuera y vuelvas a casa con fotos bien expuestas.
¿Qué tipo de luz mide el exposímetro de la cámara?
Esto es VITAL porque es uno de los errores más frecuentes a la hora de exponer en fotografía.
En fotografía se miden, principalmente, dos tipos de luz:
- Luz reflejada: La luz que rebota después de «chocar» con una materia y la registra el sensor de la cámara.
- Luz incidente: Es la luz real que hay en una escena. Necesitas comprar un fotómetro a parte para medir esta luz, con lo cual, para fotografía de viajes no es nada útil.
Así que, lo que tienes que grabarte a fuego es que la luz que mide tu cámara y el resultado que te da el exposímetro es la luz rebotada, que puede ser muy diferente de la luz real (incidente).
💡 Si no lo has hecho ya, te recomiendo que leas antes el artículo sobre entender la luz natural en fotografía viajera.
Un ejemplo de esto muy típico en fotografía viajera es cuando hacemos fotos dentro de un bosque o una jungla, como en Taman Negara (Malasia). Tus ojos ven perfectamente pero son lugares muy tupidos, con muchas texturas, colores oscuros donde se «rebota» muy poca luz. Así que vas a tener que ajustar bien los parámetros.
Entonces te preguntarás ¿Y cómo puedo hacer para medir y exponer una fotografía para que refleje lo más real posible la luz que había en ese momento? Pues controlando los elementos que hemos comentado anteriormente.
Porque como veremos más adelante, la exposición correcta según el «exposímetro» no es siempre la exposición que a ti te interesa.
¿Qué es medir y exponer correctamente una fotografía?
Cuando decimos que una foto está bien expuesta es que se ve correctamente, se ven detalles en las zonas más claras (altas luces) y las zonas más oscuras (negras).
Así que antes de entrar en la «técnica» para medir y exponer una fotografía, vamos a ver un par de conceptos que nos van ayudar mucho: El rango dinámico y el histograma.
Conocer el rango dinámico
El rango dinámico es la capacidad que tiene tu cámara de capturar detalles en las zonas más oscuras y en las zonas más claras de una foto, mientras también hay bastante información en los tonos medios.
Nuestro ojo, ante una escena, es capaz de distinguir muchísimo más detalle en todo el rango tonal de la foto, sin embargo la cámara tiene bastantes más limitaciones.
Seguro que te ha pasado, estar contemplando un atardecer precioso, vas a hacer la foto, y ¡Pam! o te sale negro el cielo, o te sale el sol blanco….¡No hay forma! Hay demasiado contraste para que nuestra cámara sea capaz de sacar el detalle del suelo y el naranja bonito del sol en una misma foto.
Esto es así ,no hay que darle más vueltas. Algunas cámaras profesionales tienen un alto rango dinámico y tendrán menos problemas, y aunque la mayoría de cámaras de nivel medio – avanzado, tienen suficiente rango dinámico como para trabajar bien en esas situaciones, muchas veces no te va a quedar más remedio que escoger: O sacas bien las luces, o sacas bien las sombras.
💡Si estás pensando en cambiar de cámara, échale un ojo a nuestra guía para escoger una buena cámara para viajar.
En el caso del atardecer, pues es más bonito si protegemos el detalle en las altas luces y convertirmos las sombras en bonitas siluetas.
💡 Respecto a esto, existen técnicas para contrarrestar este contraste, como por ejemplo, usando filtros fotográficos, o bien en post-producción usando la técnica del horquillado.
Seguro que te suena el término HDR (Hihg Dinamic Range). Son fotos en los que hay muchísimo detalle tanto en las sombras como en las luces, como esta foto.
Así que saber un poco qué es el rango dinámico de la cámara te ayudará a entender y exponer correctamente en situaciones complejas. Y en la siguiente herramienta que vamos a ver, el histograma, podrás saber si tus fotos tienen un buen rango dinámico.
Si te interesa adentrarte en la teoría del rango dinámico este artículo lo explica muy bien.
Entender el histograma para medir y exponer bien una fotografía
Es el gran ignorado de la fotografía popular, pero una vez lo entiendas no te vas a querer deshacer de él.
El histograma es el chivato más fiel y te dirá si tu foto tendrá un buen rango dinámico, si va a salir muy «quemada» o sobreexpuesta, o si no se va a ver un carajo. Es decir, si está bien expuesta.
El histograma a grandes rasgos se divide en tres grandes áreas: Los tonos oscuros, los tonos medios y los tonos claros.
Las cuatro «subzonas» del histograma sería:
- Negros
- Sombras
- Tonos medio
- Luces
- Altas luces
La fotografía perteneciente al histograma de antes, sin necesidad de verla podríamos decir que está bien expuesta y tiene un buen rango dinámico. Vamos a ver algún histograma más.
¿Es un fotografía subexpuesta o sobreexpuesta?
En este caso, es una fotografía subexpuesta.
Así que a partir de ahora, activa la visibilidad del histograma en tu cámara. Para que cuando le des al play para ver la foto que acabas de hacer, tengas la información al instante sobre la exposición.
Es muy fácil, en el modo de visión de la pantalla, seguro que le das al joystick en alguna dirección y te aparece de esta forma.
Ahora que tenemos este par de conceptos claro, vamos a aplicarlos cámara en mano, y vamos a ver cómo medir y exponer una fotografía a nuestro gusto.
Entender el triángulo de la exposición para medir y exponer una foto: La clave para controlar la luz
Entender el triángulo de la exposición y su relación entre los elementos que la forman es como entender la relación entre sujeto-verbo-predicado para montar una frase comprensible.
Los elementos que forman el triángulo de la exposición son tres: ISO, abertura del diafragma y velocidad de obturación.
Qué es la ISO
La ISO es la sensibilidad o capacidad del sensor de tu cámara para captar la luz. El sensor de la cámara es donde va a incidir la luz que ha atravesado todas las lentes del objetivo y donde se va a registrar la imagen final.
Normalmente, los valores ISO de casi todos los sensores (sean fullframe, APSC o micro 4/3) parten de una sensibilidad 100 hasta sensibilidades de 25.000, aunque puede haber incluso menores.
Cuando aumentamos la sensibilidad ISO, por ejemplo de 100 a 160 pasos, estamos haciendo que el sensor capte mucha más luz, que deje pasar más fotones al sensor.
Imagina un colador de esos de rejilla muy muy tupida ¿Verdad que deja pasar poca cosa? Pues si quisiéramos que pase más líquido por ese colador, haríamos los agujeros o el entrelazado más holgado, de esta forma pasaría más sustancia. Pues el colador es el sensor, y el líquido es la luz. Cuando aumentamos la ISO le estamos diciendo al sensor que registre más luz.
Entonces ¿Qué sucede si estoy haciendo un trekking por en medio de una jungla súper frondosa? Pues que como va a haber poca luz rebotada, vas a tener que pedirle al sensor que sea más generoso captando fotones, así que subiremos la ISO para que las fotos no nos queden demasiado subexpuestas. ¿Hasta dónde? Pues aquí depende de cómo juegues con el resto de participantes de la exposición: la abertura y la velocidad.
¡Pero recuerda el histograma! Comprueba que no hayas perdido información en los extremos.
Más adelante veremos las implicaciones prácticas en situaciones reales de viaje.
Los peligros de la ISO: El ruido
En fotografía diurna la ISO no te va a suponer ningún problema. Realmente puedes disparar de día con valores ISO elevados que la calidad de tu fotografía no lo notará. El problema viene en circunstancias de falta de luz, como pueda ser en el interior de un edificio o por la noche.
Al haber poca luz disponible, vamos a pedirle al sensor que sea súper sensible a los fotones de la luz, pero a veces, realmente el sensor no puede captar toda información de la escena y «crea un pixel» en su lugar. Un píxel extraño al que llamamos ruido o grano.
Por eso en fotografía nocturna muchas veces hay que lidiar o aceptar que la fotografía tendrá un poco de ruido. Pero más vale hacerlo que perder la foto. De hecho, hay fotografías en las que se añade grano de forma creativa para darle ese toque antiguo.
Más adelante veremos que una forma de evitar esto es jugar con la abertura y la velocidad para no «forzar» tanto al sensor.
La abertura del diafragma
El diafragma se encuentra en el objetivo, digamos que es «la pupila», un término muy intuitivo con el que ya puedes hacerte una idea de la función básica de éste.
Controlando la abertura del diafragma de nuestro objetivo vamos a dejar entrar más luz o menos luz. Siguiendo con las metáforas, si antes usamos el colador para la ISO, ahora usaremos el grifo.
El diafragma funciona como un grifo, si tu lo abres a tope saldrá un chorro de agua, si lo vas cerrando va saliendo menos, hasta que realmente solo cae un hilillo. Que entre más o menos luz hacia el sensor, depende de «cuánto» abramos el grifo.
El diafragma tiene otras funciones, como controlar la profundidad de campo, pero en este artículo nos centraremos en su función para medir la luz en la fotografía. La profundidad de campo la veremos en un artículo a parte.
Los pasos de abertura del diafragma
Para ir determinando cuánto abrimos el diafragma se ha establecido una nomenclatura que universalmente se conoce como «f».
Así, si en alguna foto lees «f/2.8» se refiere a la apertura del diafragma que se ha utilizado.
Los valores del diafragma depende de los objetivos (normalmente los de mejor calidad pueden llegar a tener aberturas de f/1, pero la gran mayoría pueden ir desde el f/1.4 , mayor abertura (grifo súper abierto) hasta f/22 (grifo súper cerrado).
La apertura mínima y máxima de tu objetivo viene indicado en el mismo.
Una de las cosas que tienes que recordar es que los valores bajos de «f» representa una apertura mayor.
Cada paso que das de un «f» a otro «f» se dobla la cantidad de luz, o se divide. Por ejemplo, si pasas de f/8 a f/11 entrará la mitad de luz, y si pasas de f/8 a f/5.6 entrará el doble de luz. Recuerda que los valores más bajos son mayor abertura.
Ahora que ya tenemos un nuevo elemento para entender la exposición en fotografía, te pregunto: Si hay poca luz y no quieres forzar al sensor para evitar el ruido ¿Qué elemento podrías usar para hacer que entrar más luz en el sensor? Pues eso, abrir el diafragma.
Ahora vamos con el último elemento del triángulo de la exposición: la velocidad de obturación.
Velocidad de obturación
El obturador es un elemento que se encuentra en el cuerpo de la cámara, justo delante del sensor. Es la «última barrera» que se encuentra la luz antes de llegar al sensor.
El obturador son como dos «cortinas o paneles» que se abren y se cierran, como unas puertas automáticas, y lo hacen a la velocidad que nosotros le indicamos (o a la velocidad que estima la cámara si disparamos en automático).
Así que, si abrimos y cerramos muy rápidamente las cortinas entrará poca luz, y si las dejamos abiertas mucho rato, pues entrará más luz. Esa es la función del obturador en el triángulo de la exposición.
Los pasos del obturador
Al igual que el diafragma se medía en pasos «f/ x » o «f-stops» el obturador se mide en «1/ x». Donde la «x» son fracciones de segundo, o segundos completos en velocidades bajas.
Por ejemplo, una velocidad es de 1/100 no significa que esté 100 segundos abierto ¡Todo lo contrario! Imagina si usas la velocidad 1/4000. Cuando más alto es ese valor más veloz es el obturador, pero eso quiere decir que menos luz entra en el sensor.
Sin embargo cuando la velocidad sube de 1 segundo, entonces sí hablamos de segundos completos, y en nuestra cámara aparece como x». Por ejemplo, si quiero hacer una larga exposición puedo poner una velocidad de 15″, donde 15 serán los segundo efectivos que va a estar el obturador abierto.
Al igual que el diafragma, el obturador tiene otra función, la de congelar o no el movimiento. Así, si la velocidad del obturador es alta, como por ejemplo, 1/500, conseguiremos congelar una escena rápida, o bien, si la velocidad del obturador es lenta, como 10″ el sensor captará todo lo que suceda delante de él, dejando al final, imágenes entremezcladas, o las típicas de agua sedosa en las cascadas.
Sobre este tema entraremos en detalle en el artículo en el que hablemos sobre cómo congelar el movimiento o fotografía de fauna.
Por ahora, quédate con la función del obturador como otra fuente de controlar la luz para medir y exponer una fotografía correctamente.
Medir y exponer una foto sin quitar el ojo del visor: El exposímetro y los modos de medición
Ahora que ya sabes que puedes usar el chivato del histograma para saber si tu foto ha quedado bien expuesta, que puedes usar el triángulo de la exposición para controlar la cantidad de luz que entra en tu sensor, vamos al siguiente paso ¡Hacerlo directamente antes de disparar!
Imagina que no pudieses tener una referencia que te indicase si la foto te va a salir bien expuesta o no, harías mil fotos. Lo ideal es que con la práctica, hagas una o dos para probar diferentes exposiciones.
Para esto tenemos el exposímetro de la cámara y los modos de medición. Estos dos conceptos se tienen que explicar de forma paralela porque uno depende del otro. Es decir, dependiendo del modo de medición que escojas, el exposímetro te dirá una cosa u otra.
⚠️ Antes de comenzar hay que recalcar algo VITAL: La luz que vas a medir, la luz que va a interpretar tu cámara y el resultado en el exposímetro es la LUZ REBOTADA. Vamos a ver que implicaciones prácticas tiene esto.
Cómo usar los modos de medición para medir y exponer una fotografía correctamente
Las cámaras tienen tres o cuatro modos de medición dependiendo de la marca: Punto único, ponderada central y matricial.
Básicamente, aunque algunos tengan tres métodos o cuatro, se basa en medir la luz rebotada o bien de un punto fijo, o bien de una zona concreta de la escena o bien una cálculo de toda la escena.
Una vez que sabes que lo que está midiendo tu cámara es la luz que rebota o refleja cada objeto, te será muy sencillo entender estos modos.
Medición de punto único
Cuando escoges esta medición tu cámara medirá la luz que rebote ese punto exacto donde estás midiendo (apuntando). Por eso su símbolo es:
Por ejemplo, si estás en un atardecer, y para medir la luz apuntas al suelo, el exposímetro te va a dar una medición según la luz que te «rebote» ese suelo, que seguramente sea oscuro. Y pensarás ¡Me sale subexpuesto! Subirás la exposición y cuando hagas la foto no podrás ni verla de lo quemada que estará ¡Has medido mal!
Así que, la medición de punto único la puedes usar cuando te interese saber o preservar la exposición en un determinado punto de la foto. Por ejemplo, si voy a hacer un foto más o menos a primer plano y me interesa que el sujeto quede bien expuesto y me da igual el resto.
Medición ponderada central
Esta medición es parecida a la anterior pero el área de luz que mide la cámara es un poco mayor, por eso aparece ese espacio de paréntesis en el punto.
La cámara mide el lugar donde apuntas y un poquito más. Este «poquito» más lo puedes ajustar en la configuración de la cámara.
Por ejemplo, imagina que quieres hacer una foto de unas velas dentro de un templo oscuro, y quieres que se vea bien la zona de la llama. Puedes usar este modo de medición apuntando a la zona de la base de la vela y ver qué te dice el exposímetro.
*Medición parcial en Canon
Canon tiene un sistema más de medición de la luz. La parcial está a medio camino entre la ponderada central y la matricial.
Medición matricial
Esta medición lo que hace es medir en diferentes puntos de cada escena y te da un resultado medio. Por eso el símbolo es:
Si la escena tiene un rango dinámico amplio (¿Recuerdas lo del rango dinámico?) es un buen método de medición, por ejemplo en un paisaje con una luz agradable.
Interpretar el exposímetro para medir y exponer bien una fotografía
Ahora ya sabemos qué herramientas tenemos para medir la luz de forma selectiva. Ahora vamos a ver cómo interpretar de forma correcta lo que nos dice el exposímetro…Porque a veces engaña.
El exposímetro es una línea horizontal con un rango de valores entre -2 y +2, en algunas cámaras puede ser -3 o +3. Y, obviamente, en el medio los valores intermedios.
El rango tonal para entenderlo mejor
Para comprender aún mejor el exposímetro vamos a presentar a otro elemento fotográfico: el rango tonal.
Pongamos nuestra visión en modo blanco y negro. Desde el blanco más puro hasta el negro más puro hay toda una gradación de grises, ¿verdad? Un amplísimo conjunto de valores tonales, pero para simplificarlo vamos a usar el sistema de zonas de Ansel Adams.
El gran Ansel Adams simplificó toda esa inmensa gradación en un sistema de 10 zonas que van del 0 (Negro puro) al 10(Blanco puro). Por tanto la zona 5 será el gris medio.
¿Y qué tiene que ver esto con el exposímetro? Puedes verlo en la foto, pero sigamos.
Cuando el exposímetro te dice que algo está en bien expuesto, es decir, en el medio del exposímetro (posición 0) , en realidad está diciendo que el valor tonal de ese punto es gris medio. Si convirtiésemos la foto al blanco y negro, nos daría una zona V.
Esto se ve clarísimo cuando quieres fotografiar cosas blancas. Imagina que vas a fotografiar una pared blanca, escoges un modo de medición de punto único y el exposímetro te dice que te has pasado tres pueblos, que la foto está quemada ¿Seguro?
¡Pues no! Si le haces caso al exposímetro y aplicas los ajustes que ya sabes (triángulo de la exposición) para que el exposímetro esté a 0, te va a quedar una pared grisácea, no blanca. Entonces para que esa pared (o la nieve por ejemplo) aparezca blanca en tu foto tendrás que subir algunos pasos la exposición ¿Cómo? ¡Ya lo sabes! Pero cuidado no te pases…
Lo mismo pasa con el negro. Para que salga realmente de ese color debes dejar que el exposímetro se quede un punto y algo más hacia la izquierda (Entre -1 y -2)
De todas formas, así, en general, te puedes fiar del exposímetro para hacerte una idea de la foto que harás. No hace falta buscar siempre el 0, en valores de +1 o -1 (o incluso más) puedes encontrar el equilibrio perfecto.
Usa los modos de medición, mira el exposímetro que mide la luz rebotada, recuerda el gris medio ¡Y mira el histograma!
Una vez que interiorizas esto ¡A probar! Sin práctica, da igual toda la teoría que leas.
Cómo medir y exponer una fotografía en la práctica de un viaje
¿Y cómo se aplica todo esto de forma práctica en tus fotos de viaje?
Observa la luz de la escena a fotografiar
Imagina que llegas a un mercado y quieres parar a hacer unas fotos. Lo primer que tienes que hacer es una evaluación rápida con la mirada de la luz de la escena. Dónde están las zonas oscuras y posibles problemas de altas luces.
En esto se adquiere rapidez con la práctica y la experiencia, y ya verás que pronto llegarás a un sitio y sabrás qué ajustes tienes que poner en la cámara con tan solo mirar unos segundos a tu alrededor.
Si luego vas a editar la fotografía es mejor proteger las altas luces, normalmente son más fáciles de recuperar las zonas de sombras que los cielos quemados.
Fíjate en la imagen siguiente. En edición es más fácil recuperar y darle vida a las zonas oscuras (mientras no sean negro puro) que recuperar zonas muy blancas. Pero si nos pasamos con los blancos…por mucho que bajemos la exposición…Quedará un churro : (
Un modo de medición para cada tipo de foto
Yo, personalmente, de forma general, siempre disparo con el modo de medición de punto único, pero no es útil para todas las situaciones
Es decir, si vas a hacer un retrato a alguien usa el punto único o ponderada al centro, enfoca en los ojos, deja que el exposímetro se vaya sobre el +1 sin miedo y mira el resultado.
En fotografía de paisajes es muy útil el matricial, porque al haber muchas zonas de luz diferentes, te dará un ponderación amplia. Haz varias tomas siempre protegiendo el cielo ¡Protege las altas luces!
💡 Recuerda que para paisajes es muy útil (y fácil) el uso de los filtros fotográficos.
El modo Program para practicar con el exposímetro
Dentro de los modos de uso de la cámara tienes el modo automático, el modo manual, los modos semiautomáticos y el modo Program, que es un híbrido.
Normalmente es ignorado por el 80% de las personas que poseen una cámara, pero tiene muchas ventajas, y para aprender a leer y practicar con el exposímetro va de lujo.
El modo Program es un modo automático porque escoge por ti la velocidad de obturación y la apertura del diafragma pero deja en tus manos la ISO, el modo de medición, el balance de blancos y los modos de enfoque.
Muy bien ¿Y qué tiene que ver con el exposímetro? Pensarás. Pues que con el método Program puedes usar otras de las funciones de la cámara más olvidadas el EV o Valor de exposición.
El botón mágico EV +/-
Lo reconocerás en tu cámara con un simbolito de + y – rollo «ying y el yang».
El EV es una función que sólo puedes usar en los modos semiautomático y en el Program. Con esta función puedes modificar la exposición de la foto sin tener que usar el triangulo de la exposición (ni el obturador ni el diafragma, ni la iso), lo hace la cámara solita.
Solo tienes que pulsar el botón y sin soltarlo mover la ruedita hacia el más o el menos, dependiendo de lo que te interese.
Es ideal para situaciones en las que la luz está cambiando mucho, no puedes estar tocando los parámetros todo el rato. Por ejemplo, imagina que estás en un mercado con mucho bullicio, escoge un modo semiautomático, sea Program (P) o prioridad a la velocidad (S o Tv), y si alguna foto sale mal expuesta, corrígela con EV.
Creo que con este repaso a todos los conceptos y funciones ya tienes material suficiente para practicar, medir y exponer una fotografía correctamente y volver a casa con fotos perfectas para editar o bien para colgarlas directamente en tu pared : )
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